Para todos ustedes mi respeto y mi saludo


Y el mundo es pequeño y la vida es breve. Hay que vivir y caminar. Y, bueno, con el poco beneficio que sacamos ayudamos a mantener los servicios que llevamos a cabo en la oficina: atención a presos y familiares, compra de biblias, rosarios y libros religiosos para ellos, seminarios de formación etc.
Pero les escribo no para contarles eso, lo cual es importante. En este viaje me encontré con un sacerdote chino que, gracias a un intérprete, pude conocer sus angustias y esperanzas.
Está el solo al frente de una maravillosa iglesia que, durante la Revolución Cultural fue convertida en fábrica y semi-destruida.

Les pido por tanto una oración muy profunda y sincera.
A mi regreso les prometo un informe más detallado.
Les pido también una oración muy sincera y profunda por un sacerdote muy querido, miembro de mi clase graduanda, el cual está pasando por una enfermedad y, sobre todo, por unos problemas muy serios que están haciendo peligrar su sacerdocio.

Yo me atreví a prometer que toda la cadena de Descubriendo el Siglo XXI iba a rezar por él. Pongan en sus intenciones “Por el sacerdote de la clase del P Tomás que necesita nuestras oraciones¨
El Señor sabe como distribuir nuestros esfuerzos y oraciones sinceras. Sé que no me van a fallar. Confío en que todos ustedes van a rezar por estas dos intenciones. Y nada más. Salgo corriendo que el autobús si no me deja. Que el Señor los bendiga a todos.
P Tomás